A continuación te dejamos unos consejos para mantener tu kokedama en óptimas condiciones.

 

RIEGO

Las kokedamas se riegan por inmersión y la frecuencia del riego depende de las necesidades específicas de las plantas que contienen. Para regarlas correctamente, sigue los siguientes pasos:

  1. Sumergir la Bola: Coloca la bola de kokedama completamente en un recipiente con agua.
  2. Tiempo de Inmersión: Déjala sumergida durante aproximadamente 5 a 10 minutos. Sabrás que la kokedama está completamente regada cuando dejen de salir burbujas del agua.
  3. Escurrir el Exceso de Agua: Pasado el tiempo de riego, retira la kokedama del agua y deja que escurra el exceso de agua sin apretar la bola.
  4. Colocar en su Lugar Habitual: Una vez escurrida, coloca la kokedama en su lugar habitual.

Este método asegura que la planta reciba la cantidad adecuada de agua y previene el riego excesivo.

 

MANTENIMIENTO DEL MUSGO

Es recomendable pulverizar la bola de la kokedama de vez en cuando para mantener la humedad del musgo y alargar su tonalidad verde, el máximo tiempo posible ya que con el tiempo, es natural que el musgo se torne marrón.
Para mantener el aspecto inicial de la kokedama, se puede añadir musgo nuevo cuando sea necesario. Esto ayudará a que la kokedama conserve su apariencia fresca y vibrante.

 

HUMEDAD

Si el ambiente es seco, o la temperatura es muy alta, se pueden rociar las hojas de la kokedama con agua, pero nunca las flores.

 

UBICACIÓN Y TEMPERATURA

Podemos ubicar nuestras kokedamas en cualquier ambiente interior con buena iluminación, evitando exponerlas al sol directo.
Es importante protegerlas de fuentes de calor y frío artificiales, como calefactores y aires acondicionados, así como de las corrientes de aire. Esto ayudará a mantener las plantas saludables y a prolongar su vida.

 

ABONO

Aunque la frecuencia de abonado puede variar según el tipo de planta, en general es recomendable fertilizar las kokedamas desde la primavera hasta el mes de octubre.
Para ello, una vez al mes, añade fertilizante líquido al agua de riego. Esto proporcionará a tu kokedama los nutrientes necesarios para que se mantenga saludable y en óptimas condiciones.

 

PODA

Es importante cortar todas las ramitas que no estén en buen estado. Cualquier rama u hoja que esté amarilla, seca o rota debe ser eliminada. Para hacerlo, utiliza tijeras previamente desinfectadas con un poco de alcohol o un desinfectante comercial.
Una vez hayas terminado de podar, limpia de nuevo las tijeras. Esto ayudará a prevenir la transmisión de enfermedades de una planta a otra.